Sin lugar a dudas, la plaza de María Pita y el edificio consistorial de A Coruña es uno de los mejores y más bellos ejemplos de arte civil de España de los siglos XIX y XX.
En el centro de la ciudad se levanta esta grandiosa plaza formando un conjunto de gran armonía. El nombre de la plaza es en honor a la heroína local llamada María Pita que participó activamente en la defensa de la ciudad contra el ataque de los corsarios ingleses capitaneados por Drake. Antiguamente esta plaza recibía el nombre de Plaza de Alexón. A mediados del siglo XIX se empezó a diseñar y construir esta plaza. La plaza abarca un espacio de más de 10.000 m2.
En tres de sus lados encontraremos edificios porticados, con hermosas balconadas de hierro forjado y con las tan representativas galerías de cristal de la ciudad herculina. A un lado del concello se sitúa la iglesia de San Jorge edificada en 1693 por orden de la Compañía de Jesús. Orden que fue ejecutada por Domingo de Andrade en estilo barroco, creador también de la Torre del Reloj de Santiago de Compostela. Se caracteriza por su profusa decoración escultórica y por las enormes columnas de su fachada.
Pero sin duda el elemento principal más representativo y que más llamará la atención de los visitantes, es el Palacio Municipal, donde se alberga la casa consistorial de A Coruña. Fue levantado a principios del siglo XX y se organiza mediante tres grandes torreones rematados por unas bellas cúpulas. En el centro se levanta una balconada de hierro forjado desde donde las autoridades se dirigen a los ciudadanos en los actos municipales.
El edificio fue creado por Pedro Mariño con un estilo ecléctico y con huellas modernistas, propias de finales del siglo XIX y principios del XX. De destacar son sus bellos salones interiores donde se celebran los plenos.
Además en su interior alberga una pinacoteca con cuadros de los mejores pintores gallegos y una de las mejores colecciones de relojes de España.