El castillo de Soutomaior es en la actualidad una de las fortalezas más emblemáticas de Galicia y uno de los pocos que se conservan en pie y manteniendo parte de su estado original. Esto fue gracias a que estuvo habitado por un largo periodo y a la labor de restauración de las últimas décadas.
Situación
El castillo de ubica en el concello que le da el nombre, Soutomaior, en una elevación en el valle del Verdugo de 215 metros de altitud que cuenta con una gran visibilidad del valle y de su desembocadura.
Desde la fortaleza se divisa a a escasa distancia el pico piramidal donde se levantó otra fortaleza, el castillo de Castrizán.
Historia
Los orígenes probables de esta fortaleza de Soutomaior se remontan al siglo XII, en tiempos del ya señor de Sotomaior Paio Méndez Sorrede aunque hay leyendas que sitúan su origen en la alta edad media. En el siglo XV el poderoso Pedro Madruga hereda el castillo y lo convierte en su morada principal. A pesar de sus enfrentamientos con la corona, sobrevive a la demolición ordenada por los Reyes Católicos en el siglo XVI de numerosas fortalezas y el mismo Pedro Madruga conserva varios de sus títulos nobiliarios. Sin embargo la altura de la torre fue rebajada como castigo y varias de sus murallas desmanteladas.
A su muerte la familia pierde protagonismo y poder a la par de la pérdida de función de este tipo de fortalezas. Posteriormente y después de los habituales problemas sucesorios pasa por varios propietarios hasta que en el siglo XIX y después del incendio de 1809 que acabó con el archivo histórico queda en manos del Marqués de la Vega que lo adapta como residencia y a partir de ahí comienzas sus transformaciones.
Ya en el siglo XX el castillo de Soutomaior pasa a manos de María Vinyals y Ferrés, marquesa de Ayerbe, hasta que lo pierde por sus deudas en una subasta. A partir de ahí pasa a Alberto Dopazo y Segade y en 1935 lo adquiere un militar de origen puertoriqueño, Eugenio Carlos de Hostos y de Ayala. Hemos llegado a leer que otro de sus propietarios, de nacionalidad alemana y relacionado con el régimen nazi lo utilizó como centro de actividades de dudosa explicación durante la II Guerra Mundial. Finalmente en 1982 es comprado por la Diputación.
Reconstrucciones
Tras la popular Revuelta Irmandiña que había hecho añicos casi todas las fortalezas de Galicia, Pedro Álvarez de Soutomayor, más conocido como Pedro Madruga, ordenó su reconstrucción en 1467.
En el siglo XVIII, el castillo de Soutomaior queda abandonado como atestigua el Padre Sarmiento en 1745 y a finales de este la torre de homenaje estaba destruida parcialmente y la murallas muy deteriorada por los expolios. Sin embargo en el siglo XIX sabemos que el Marqués de la Vega hizo reconstruyó las ruinas, ofreciendo el aspecto neogótico de la actualidad. Este mismo año también se recuperó el jardín al estilo francés y se plantaron nuevas especies.
En 1935 el propietario y último morador Eugenio Carlos de Hostos impulsó la primera restauración en época contemporánea. En el año 1982 la propiedad fue adquirida por la Diputación de Pontevedra y a partir de ahí comenzó su restauración que fue inaugurada en el año 1987. Esta fue obra del famoso arquitecto Cesar Portela y Rafael Fontoira, quién se encargó de la residencia. Así mismo también se acondicionaron los jardines se plantaron viñedos y frutales y se mejoraron los camelios.
Estas obras supusieron un desembolso de 500 millones de pesetas (3.000.000 €), lo que supuso un gasto diez veces mayor que la adquisición.
En 2017 se aprobó una intervención que supondrán una inversión de unos 4.000.000 de euros para la puesta en valor del conjunto y que se centraran en el acondicionamiento del castillo, el entorno y la renovación del museo apostando por nuevas tecnologías con una inversión de casi 700.000 €.
El castillo
A pesar de las restauraciones de los últimos 150 años el castillo conserva buena parte de su forma original medieval. Tiene dos torres (torre de homenaje de 15 metros y la Torre del Conde) unidas por medio de un cuerpo central que lleva al patio de armas, defensas reforzadas y un gran foso sobre un puente levadizo. Destaca la Galería de las Damas con arcos ojivales al estilo neogótico y que fue construida en las remodelaciones del siglo XX.
El museo
Desde 1987 el castillo alberga un museo que nos acerca la historia de la fortaleza, los señores feudales y de diversos personajes históricos que habitaron el castillo. En 2018 el contenido fue cambiado y modernizado.
El precio medio por su visita es de 5€ y las entradas al museo varían entre los 3 € de precio reducido a 7,5€ de visitas guiadas.
Los jardines
Gran parte de este excelente jardín se lo debemos a los marqueses de la Vega, que en 1870 comienzan la plantación de diferentes especies exóticas llegadas desde diferentes partes del mundo.
Se extiende sonre 15.700 m2 y encontraremos 175 especies de árboles como cedros del Líbano, eucaliptos, abies y picea, palmeras, camelias castaños, naranjales, magnolias, plátanos, acebo, ciprés, abeto de douglas, criptomeria o cedro japonés, ciprés de Lawson, cedro de incienso de California, robles, Araucarias y secoyas, así como diversos helechos y plantas. Destacamos las camelias, entre las que se encuentra el ejemplar de japónica más grande Galicia, así como 300 ejemplares más de 22 especies.
En el año 2012 los jardines obtuvieron el reconocimiento como Jardín de Excelencia Internacional por la Sociedad Internacional de la Camelia.
Protección
El castillo de Soutomaior está catalogado como Bien de Interés Cultural desde 1995 e incluido en la lista de Monumentos histórico-artísticos de España de1931.
